Enfermedades de transmisión sexual

Las infecciones de transmisión sexual (ITS) se transmiten principalmente a través de actos sexuales vaginales, anales y orales no protegidos. Es posible contraerlas independientemente de la edad o de que las relaciones sean homosexuales o heterosexuales. Pueden transmitirse también de madres a niños en el embarazo, en el parto y en la lactancia, a través de la sangre y sus derivados o a través de trasplantes de órganos.

Las infecciones más frecuentes son:

Muchas ITS pueden tener consecuencias graves en el tiempo, como esterilidad, hipofertilidad, daños perinatales, tumores, patologías crónicas. De algunas ITS es posible recuperarse, si tratadas inmediatamente y de forma correcta. De otras, como el VIH, es imposible recuperarse, aunque una diagnosis temprana permite tratarlas. Es importante diagnosticar la presencia de una infección lo antes posible. En el consultorio, un médico controlará y buscará posibles señales de infección y, cuando sea necesario, prescribirá los exámenes más indicados y proporcionará información útil. Además, profesionales especializados están a disposición de los individuos y de las parejas para ofrecerles consejos, apoyo y material informativo.

El programa ofrece: